10 consejos para estudiar y trabajar en el extranjero
Estudiar y trabajar a la vez puede ser un gran reto para muchos y más todavía si lo haces en el extranjero. Por eso, te vamos a dar diez consejos para que le saques el máximo provecho a tu aventura:
¿Cómo encontrar trabajo en el extranjero?: siempre es una buena idea empezar unas prácticas o encontrar un trabajo temporal mientras estudias, para poder pagarte tus gastos. Y todavía es más necesario si estás en otro país. De esta manera vas a integrarte mejor en una nueva cultura y tendrás la oportunidad de conocer a gente nueva. Si estás barajando esta opción, StudentJob puede ser una buena manera de conseguir trabajo fuera de España. Además de ofrecer prácticas, trabajos temporales, trabajos para estudiantes, etc. también encontrarás vacantes para trabajar en el extranjero.
No te agobies: vivir en un país nuevo puede ser duro los primeros días por no saber cómo funcionan las cosas y por el idioma. Por eso te recomendamos que vayas siempre unos días antes de empezar el trabajo y las clases, así podrás descubrir con calma qué bus o tren debes usar, qué supermercado es mejor, etc.
No estás solo: es normal que los primeros días tengas una sensación de soledad, pero pronto se acabará. Aunque parezca mentira, vas a conocer a muchísima gente y tendrás siempre un plan que hacer.
Nunca digas NO: este puede ser uno de los mejores consejos. Aunque a veces estarás cansado y lo único que te va a apetecer es tumbarte en el sofá a ver una peli, nunca rechaces los planes que te propongan. Lo más probable es que estés en esa ciudad por un tiempo limitado, así que aprovecha al máximo tu estancia allí.
Intenta adaptarte: cuando vas a vivir a otro país verás que sus costumbres pueden ser muy distintas a las nuestras. Cuanto más te adaptes a sus costumbres más rendimiento le podrás a tu estancia allí, sobre todo si estudias y trabajas a la vez. Por ejemplo, la hora de comer y cenar es muy distinta en España al resto de Europa. Intenta cambiar estos hábitos ya que lo más probable es que el centro donde estudies y tus compañeros de trabajo sigan ese horario.
Mantén tus hobbies: no dejes de hacer aquello que más te gusta solo porque estás en una ciudad distinta. Realizar aquello que más te gusta te va a hacer conocer a gente nueva y que está interesada en lo mismo que
Atrévete: no tengas miedo a probar cosas nuevas, como por ejemplo la comida. A muchos de nosotros nos cuesta cambiar porque siempre acabamos comiendo lo mismo. Sal de tu zona de confort y prueba lo más típico del país donde estés.
Ten confianza en ti mismo: ¡puedes hacer lo que te propongas!
Come sano: es verdad que cuando ya no vives en casa de tus padres tienes siempre la tentación de comprarte en el supermercado todo aquello que te gusta (y no suele ser lo más sano). Pero también hay que cuidarse, así que intenta mantener una dieta equilibrada para tener toda la energía que necesitas.
No pierdas el control: sé responsable. A veces, cuando tienes toda la libertad que quieras, puedes perder un poco el control. Pero recuerda tus metas y propósitos para volver a centrarte. Solo de esta manera podrás cumplir tus objetivos.